Cómo afrontar la maternidad sin ayuda familiar

Processed with VSCO with c1 presetA raíz de los últimos posts sobre maternidad he recibido bastantes mensajes en Instagram en los que me contáis vuestras situaciones, dudas o inquietudes. Un comentario me llegó especialmente, era de una de vosotras y en él, la chica en cuestión me decía que le daba un poco de miedo adentrarse en la aventura de la maternidad porque vive en una ciudad que no es la suya y su pareja pasa muchos días de viaje por trabajo. Si no lo sabéis, os cuento que esas dos variables han formado parte de mi vida hasta hace poco. Por un lado, nosotros hemos estado viviendo en Madrid más de 5 años y somos de Elche, tuvimos a Marta y continuamos viviendo allí hasta que tuvo 11 meses. Por otro lado, cuando nos volvimos a Elche, lo hicimos sólo la peque y yo, Erico continuó viviendo en Madrid hasta ahora. En ambos casos hemos tenido que sacarnos las castañas del fuego nosotros solos, en Madrid porque lógicamente no teníamos a nadie más y, en Elche porque, además de no estar papá, los abuelos trabajan y no nos gusta cargarlos de responsabilidades que no tienen por qué asumir. Hoy os cuento mi experiencia.

Os diré que soy (somos) muy independientes, que después de vivir tantos años solos en otra ciudad nos hemos acostumbrado a buscarnos un poco la vida, a no dar explicaciones y a encontrar soluciones por nuestra cuenta. Por eso, no nos dio miedo ser papás en una ciudad que nos tenía adoptados (y que adoramos!). Mucha gente se echa las manos a la cabeza por esto, pero hoy en día pienso que no es como antes, nuestros padres trabajan o tienen actividades en las que ocupar su día, pasar tiempo con los nietos debe ser un placer, no una obligación. Por eso, aunque algo de ayuda no viene mal, no nos cambiaba mucho el cuento por vivir en una ciudad o en otra. La organización dependía de nosotros, y así fue. Siempre he dicho -y mantendré- que pasar ese primer año de Marta nosotros 3 solos tuvo muchas ventajas. Nadie opinaba de nuestras decisiones, podíamos hacer y deshacer a nuestro antojo, planificar nuestra vida y nuestro tiempo libre según nuestras necesidades y, sobre todo, crear unos vínculos familiares muy fuertes. Conocer, disfrutar y cuidar el núcleo familiar es esencial. ¿Que pasa si la peque se pone malita en el cole o no puede ir a la escuela? me preguntaréis… Pues que nos tocaba cambiar turnos o pedir días en el trabajo, a su padre o a mi. Pero eso me pasaba en Madrid, me pasa ahora en Elche o me pasará allá donde viva. ¿Y el tiempo libre? Pues ya os he hablado de eso en el post de la conciliación, por ejemplo. Nos gusta disfrutar del tiempo de ocio en familia, los tres juntos. ¿Y si surge un viaje de trabajo o de placer en el que no pueda estar ella? Pues igual que aquí, me organizo con su papá para que uno de los dos siempre esté disponible para estar con ella.

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Con estas situaciones de ejemplo os quiero explicar que, para nosotros vivir en Madrid nunca supuso un problema en nuestra faceta de padre/ madre. Al revés, trajo consigo muchas ventajas. Obviamente la familia no nos veía tanto y a la inversa, cosa que aquí ha cambiado por completo. Aunque sea un ratito por la tarde o en la comida del domingo, sus abuelos pueden disfrutar de ella, Marta es feliz jugando con sus primos, tios, incluso bisabuelas 🙂 Verla crecer es muy especial y un privilegio que ahora nos toca compartir con más gente 😉 Pero fuera de eso, la situación no es tan grave como puede parecer.

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Como os decía al principio, desde que nos vinimos he estado sola con Marta (Erico venía a temporadas) y no sólo eso, sumad que estoy en la semana 23 de embarazo y vivimos en un tercero sin ascensor. Agradecemos infinitamente a los abuelos que la recojan del cole y pasen un ratito con ella por la tarde, pero el resto del tiempo y todas las obligaciones que conlleva tener un bebé de un año y medio, son cosa nuestra. Ojo, con este tema (como con todos vaya) hay muchisimas situaciones, puntos de vista y rutinas familiares, todas igual de válidas. Lo único que quiero decir es que SÍ, que en nuestros caso ha sido posible afrontar la maternidad sin ayuda familiar, por supuesto con la Escuela Infantil en el caso de que ambos progenitores trabajen, con organización y disfrutando de cada minuto porque, una cosa es segura, el tiempo vuela.

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Si queréis más detalles, os cuento un poco cómo es nuestra rutina un día cualquiera.

NUESTRA RUTINA

6h45: Me levanto, desayuno, me ducho y me visto.
7h30- 7h40: Despierto a Marta, la visto, la peino y desayuna.
7h55-8: Salimos de casa para ir a la Escuela Infantil
8h05: Dejo a Marta en el cole y me voy a trabajar.
8h30-17h00: Trabajo y Marta está en el cole.
17h00: Los abuelos de Marta la recogen del cole, ya merendada, aunque siempre re-merienda. Hay muchas escuelas que amplían el horario hasta las 18h00.
17h30-18h00: Llego de trabajar y recojo a Marta.
Ahora con el buen tiempo solemos hacer más planes que en invierno: Nos vamos a merendar, jugamos un rato con los primos, vemos a nuestras amigas. Los miércoles Marta tiene inglés de 18h10-18h30.
19h30-20h00: Ducha, pijama, juegos en casa.
20h30: Cena
21h00: Sobre esta hora Marta se va a dormir, hay días que sobre las 20h30, otros que a las 21h30… Depende de lo cansada que esté del dia! Yo a veces ceno con ella o cuando la acuesto. Entonces aprovecho para teletrabajar un rato, preparar cosas del blog, recoger la cocina y los juguetes y dejar listo todo lo del día siguiente.

Como veis, es una rutina que se puede adaptar a un horario de trabajo intensivo (por supuesto, mucho más a una jornada reducida) prácticamente sin ayuda (en muchas escuelas infantiles, además de la hora ampliada de 8h00 a 9h00 que utilizamos nosotros, también existe de 17h00 a 18h00).

Con estos temas hay muchísimas situaciones diferentes, trabajos distintos y jornadas complicadas, entiendo que no todo el mundo tiene la suerte de poder trabajar de lunes a viernes, cerca de casa o con horarios similares a los de la escuela, pero tengo muchos amigos viviendo fuera que, al final, se han apañado, igual que lo hemos hecho nosotros. Si crees que estás preparad@ para la pa-maternidad, valora opciones de organización, pero no retrases la decisión por miedo, al final, todo acaba encajando.

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3 comentarios en “Cómo afrontar la maternidad sin ayuda familiar

  1. chantalconcept dijo:

    Hola! No sabes lo identificada que me sentí con tu post, en mi caso soy de Venezuela y llevo 3 años viviendo en España, a pesar de tener algunos amigos en la ciudad, no es lo mismo si tienes familia que en alguna situación te pueda ayudar, mi esposo trabaja en la ciudad mientras vivimos en las afueras a 40 min, tengo un niño que acaba de cumplir los 4 años, en mi caso por la lejanía de su trabajo no me puedo combinar los horarios con el, solo me queda encontrar un trabajo en el que yo pueda llevarlo al cole y buscarlo, ya que no tengo quien me ayude en esa tarea, desde que entro al cole he buscado trabajo pero no he tenido suerte aun, al leer tu post me abriste la oportunidad de ver la situación de otra perspectiva, y ciertamente es verdad que hemos crecido como familia, somos mas unidos como pareja, y tal cual no le damos explicaciones a nadie. Para no hacerte tan largo el comentario, gracias por hacerme ver las cosas desde otra perspectiva y positivamente. bye

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