Foto hecha por Limalimón
Buenos días! Tenía muchas ganas de escribir este post porque estoy segura de que, a muchos y a muchas, os va a interesar. En el Hospital Medimar de Alicante, cada cierto tiempo, organizan los sábados pediátricos, unas jornadas donde tratan temas variados relacionados con embarazo y crianza. Hace unas semanas me avisaron de que el siguiente curso trataría sobre los efectos de la educación positiva y Erico y yo nos organizamos para ir. Son cursos gratuitos, de aproximadamente dos horas (con almuerzo incluido ;)) que realmente resultan súper interesantes. Si estáis cerca y tenéis posibilidad, os los recomiendo. Los pediatras y psicólogas que impartieron el curso hablaron de muchos temas al detalle, pero me gustaría contaros los tips que se me quedaron marcados:
- Hay que sacar provecho de todas las emociones. Es importante que el niño exprese todos sus sentimientos, no hay emociones negativas. Es bueno que experimente la ira, la frustración, la tristeza… No debemos limitar a nuestros hijos en ese sentido porque si no, el día de mañana se guardarán esas emociones dentro y no las compartirán con nosotros. Hay que aprender a empatizar y escucharlos, el contenido de lo que nos cuenten lo podremos gestionar después, pero nunca debemos decirles: “No llores”, “no grites”, “no tienes que enfadarte”. Es mucho mejor transmitirles que les entendemos: “es normal que te enfades si hoy llueve y no podemos bajar al parque, a mí también me da mucha rabia…” sería un ejemplo.
- No a los padres helicópteros. Esos que sobrevuelan a sus hijos por miedo a… Algo os contaba de este concepto (sin haber ido a la charla), en este post. Hay que educar a niños independientes, tolerantes a la frustración y resolutivos emocionalmente. En nuestra mano está controlar que nuestros hijos se muevan en espacios adecuados pero no impedir que se caigan, que se equivoquen… Para esto es importante dejarles hacer y que vayan adquiriendo autonomía. No triturarles la comida o darles sólo lo que les gusta, dejarles que se vistan y que hagan pequeñas tareas domésticas ellos solos, no meterles miedo para protegerlos del peligro… Huir de encerrarlos en una campana de cristal, incomunicados. Esto sólo provoca que los niños tengan dificultad para adquirir responsabilidades, que no se adapten bien a nuevas situaciones, que teman lo desconocido, que no tengan autocontrol o que no les dejemos madurar.
La mayoría de las veces el problema no es de los hijos, es de los padres. Saber tomar medidas a tiempo, es básico. También hablaron en el curso sobre la gestión de rabietas, un tema del que me apetecía mucho escuchar una opinión profesional. Os lo cuento en el siguiente post. Espero que os haya resultado interesante. Feliz día!
2 comentarios en “Efectos de la educación positiva”